Hoy estamos celebrando una
fecha muy importante en la historia de la humanidad: el día de la bandera, pero
de la bandera que plantó Neil Armstrong en la Luna un 20 de julio, hace justo
40 años. El primer hombre en la Luna, quizás en nuestros días eso no suene muy
emocionante, somos una generación que ha perdido, hasta cierto, punto su
capacidad de asombro, todo nos parece sencillo; en mi opinión, es culpa del
Internet, tener todo el mundo a nuestro alcance con sólo dar un par de teclazos
y varios clic en el mouse nos ha hecho daño. Quizá, si consideramos que esa fue
la primera vez que el ser humano puso un pie sobre otro cuerpo celeste, ajeno a
la Tierra, podamos comenzar a entender lo importante que fue el suceso.
El aterrizaje lo realizó el
módulo lunar Eagle, llamado así como tributo a uno de los signos más
importantes de Estados Unidos: el águila calva, que incluso estaba plasmada en
el escudo de la misión. El módulo de comando fue llamado Columbia. Pocos lo
saben, Columbia es el nombre poético que se dio a Estados Unidos durante
su época colonial y se considera su personificación femenina, algo así como el
Tío Sam, pero con falda. La misión se denominó Apollo 11 y en ella, tres
astronautas viajaron a la Luna: Comandante, Neil Armstrong; piloto del módulo
de comando, Michael Collins; piloto del módulo lunar, Edwin E. Aldrin.
La misión del Apollo 11 no sólo
revolucionó la visión y cautivó la imaginación de toda la gente que presenció
el suceso por televisión, también tuvo un impacto que incluso ha alcanzado a nuestra
generación. Las imágenes del alunizaje y la frase de Armstrong se han
convertido en algunos de los iconos más reconocidos del desarrollo de la
humanidad. Aunque no todo ha sido miel sobre hojuelas, no señor. Existe una
gran cantidad de personas que aseguran que todo fue una mentira, el timo más
grande de toda la historia.
Hay una teoría conspirativa
que asegura que Neil Armstrong y su tripulación jamás llegaron a la Luna y que
todo fue un show orquestado por Estados Unidos para hacer gala de un poder
tecnológico que excedía por mucho, al que realmente poseía en aquella época. Además,
la misteriosa desaparición de datos y detalles de la misión han aumentado las
dudas de muchos, ya que, por ejemplo, no se tiene copia de los planos y dibujos
de las fases de desarrollo de la maquinaria involucrada en la misión; las
cintas de telemetría y el video original de la caminata lunar fueron
extraviados, el que existe es una copia de post producción, ya que la cámara
utilizada en esta misión era una SSTV y era necesario convertir el video para que
pudiera transmitirse a los televisores normales.
Lo más interesante es que
hace unos días, el 16 de este mes, la NASA declaró que después de que una
comisión encargada de recuperar dichas cintas realizara una exhaustiva búsqueda
de tres años, se llegó a la conclusión de que fueron borradas y reutilizadas
hace varios años. Esto suena completamente lógico, una agencia con un
presupuesto como el de la NASA no se puede dar el lujo de comprar cintas
nuevas, así que ya puedes dejar de reclamarle a tu papá por haber grabado el
partido de football sobre la cinta de tus quince años. A últimas fechas, estas
teorías han ganado nuevos bríos, por ejemplo, el otro día JaDW nos comentaba
que se le hacía demasiada casualidad que sea Estados Unidos quien vaya a
detonar una bomba en la Luna, justo cuando China y Rusia están planeando
alunizajes en los próximos años.
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