Hablemos de esos juegos que luego de terminarlos te quedaste con ganas de seguir jugando no por que sea corto sino porque te gustó tanto que desearías que nunca acabaran.
En mi caso es FEZ, cuando lo terminé con todos los cubos tuve una gran satisfacción pero a la vez me daban ganas de seguir descubriendo niveles y recolectando cubos amarillos.
No era para tanto porque habría una secuela pero el hipster idiota de Phil Fish la canceló.