Si bien el consenso crítico lo ubicó en el terreno de lo estándar, Dragons Dogma, el ambicioso RPG de Capcom, embarcó un millón de unidades a las tiendas de todo el mundo y de esa suma, ya vendió por lo menos 800 mil copias, sin mencionar que en Japón ha sido toda una sensación, registrando la mejor primera semana para una propiedad nueva durante esta generación.
Lo anterior es razón más que suficiente para que Capcom piense en grande y así se lo hizo saber a sus inversionistas recientemente. Dragons Dogma es parte de una estrategia básica de establecimiento de franquicias a través de la creación de nuevas marcas, se dijo. Este juego fue desarrollado con la meta de crear otro pilar de ingresos para Capcom, junto con Monster Hunter y Sengoku Basara. Para incrementar todavía más el valor de las marcas usadas para este contenido, Capcom continuará utilizando una variedad de iniciativas que incluye la distribución continua de contenido descargable, agregó la multinacional japonesa.
En otras palabras, Capcom está muy satisfecho y aunque el objetivo de 10 millones de copias vendidas que espera lograr con Dragons Dogma se antoja todavía lejano, las declaraciones antes expuestas apuntan a una inminente secuela y, claramente, al nacimiento de un nuevo ícono en el ámbito de los juegos de rol.
Dragons Dogma es el título número 55 en la historia de Capcom en superar la marca del millón de unidades embarcadas y sus logros se magnifican cuando tomamos en cuenta que se trata de la primera incursión de la compañía en el terreno del RPG con marcadas influencias occidentales y en el de los universos de corte sandbox, es decir, Capcom tomo un riesgo y le funcionó, lo cual es encomiable cuando consideramos la plaga de secuelas y FPS de la que la industria padece actualmente.
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