Desarrolladores comienzan a protestar contra los FPS

Los desarrolladores están cansados de hacer sólo juegos de disparos y muestra de ello es la postura del diseñador Charles N. Cox, quien contribuyó a la creación de MAG, y que recientemente se comprometió a abandonar el género de acción por completo, aunque esto represente un obstáculo para su carrera.

“¡Al demonio!, he estado en este negocio a lo largo de una década llena de turbulencias y dudas, y el mundo puede escucharme con toda claridad: nunca más trabajaré en un juego de disparos en primera persona”, declaró Cox.

El productor, programador y diseñador reconoció que son los juegos más populares, pero cuestionó la ética de seguir creándolos y sostuvo que la industria podía aspirar a algo más: “Genial, todos estamos haciendo estos juegos, pero ¿deberíamos? (...) Tuve una experiencia que cambió mi opinión y me ha tenido cuestionándome desde entonces”.

Cox relató la historia de un colega desarrollador quien se veía en una situación muy complicada por tener que llevar a su pequeña hija a la oficina y exponerla a la violencia que ahí producían. De hecho, el papá tenía que mentirle, diciéndole que estaban desarrollando un juego de escondidillas.

“La respuesta a la situación no es lo que me molesta. Lo que me molesta es que siquiera exista una situación así –eso es lo vergonzoso y lo feo de esto–”.

A fin de contribuir a la innovación, pero también de poder ver a los papás a la cara es que Cox abandonará el género. “Hay una gran cantidad de innovación esperando bajo la superficie –y sí, quizás la violencia sea parte de eso; no somos seres simples. Pero como jugadores y desarrolladores conscientes, podemos empezar por evolucionar hacia una dieta más variada (…) Estamos listos para algo mejor, y estoy preparado para hacer mi parte. Ya no habrá más juegos de disparos en primera persona para mí”.

Cox es uno más en una larga lista de creativos que cuestionan el estancamiento creativo de la industria y el exacerbado apetito por violencia mostrado en ellos. De hecho, Jay Raymond hizo lo mismo hace varios meses y, curiosamente, mencionó que había desarrolladores abandonando el medio por hartazgo y repulsión hacia los FPS.

Uno más de los desarrolladores inconformes es Warren Spector, quien está en contra de la violencia adolescente en los videojuegos, tal como la que se observa en Lollipop Chainsaw, ejemplo al que se remite constantemente.