Sin duda, Capcom vive una segunda era de oro desde hace un puñado de años. Aunque tuvo deslices como el controversial Resident Evil 3 Remake, en general entregó experiencias de muy buena calidad que conquistaron los corazones de los fanáticos y vendieron millones de copias. Por desgracia, su racha positiva terminó con su más reciente lanzamiento: Exoprimal.

Exoprimal presenta un concepto sumamente divertido e interesante, pero que, por desgracia, falla en la ejecución. Tiene mucho potencial, pero acarrea problemas graves que lo alejan de la grandeza. ¿Es un desastre? A continuación, compartiré mi veredicto:

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Dinosaurios y exotrajes: una combinación ganadora

Exoprimal es honesto con sus pretensiones y sólo tiene un objetivo: ofrecer diversión inmediata. En esa línea, Capcom dio en el blanco y entregó una experiencia entretenida, especialmente en las horas iniciales y en compañía de amigos. Es muy fácil tomar el control, derrotar oleadas de dinosaurios y pasar un buen rato, pues las partidas tienen un ritmo vertiginoso y duran entre 10 y 15 minutos.

Estamos frente a un shooter en tercera persona que presenta elementos PvE y PvP en partidas multijugador 5vs5. El modo principal es Marea Jurásica, donde debemos superar una serie de retos lo más rápido posible para vencer al equipo rival. Es un concepto muy interesante y la combinación de las vertientes cooperativas y competitivas hace que se distinga de otras propuestas multiplayer.

Uno de los puntos fuertes del título es el sistema de combate. Usar exotrajes superavanzados para pelear contra hordas de dinosaurios es tan divertido como suena, ya que los enfrentamientos son directos y muy rápidos. Con excepción de las variantes más poderosas como el tiranosaurio y el triceratops, las bestias jurásicas mueren con facilidad.

Sin duda, las estrellas son los exotrajes. El juego se siente como un hero shooter porque los enfrentamientos giran alrededor de estos personajes que poseen cualidades y habilidades únicas. Afortunadamente, es muy gratificante utilizarlos porque ofrecen mecánicas que enriquecen las escaramuzas. Por ejemplo, Nimbus usa patines para moverse a gran velocidad y puede cambiar entre 2 tipos de disparo: daño y sanación. Por otra parte, Vigilant es una sniper que puede cargar su disparo y hacer un supersalto para ganar altura. Es fácil encontrar un arquetipo que se adapte a nuestro estilo.

Las exoarmaduras se dividen en 3 clases: Asalto, Tanque y Apoyo. Por supuesto, es vital que cada jugador cumpla su rol para obtener la victoria. Es una clasificación que hemos visto en innumerables títulos, pero funciona y creo que es innecesario arreglar lo que no está roto.

Exoprimal sabe muy bien cómo crear un gran espectáculo con poco. Por ejemplo, estar rodeado de enemigos y utilizar una habilidad en el momento correcto para mandar a volar a decenas de dinosaurios es genial y satisfactorio. En esa línea, los poderes de los exotrajes transmiten mucha energía y fuerza, lo que permite que la energía y adrenalina permanezcan al tope durante toda la partida.

Eso sí, hay momentos en los que rompe sus propias cadenas y muestra todo su potencial. Por ejemplo, durante algunas partidas lloverán centenares de velociraptors y en otras habrá un enjambre de pteranodons que, literalmente, formará un tornado. La cereza en el pastel son las batallas contra jefes, las cuales son difíciles y requieren la cooperación de ambos equipos; incluso el último nivel nos recordó a un raid de un MMO. Es una pena que estos enfrentamientos sean escasos.

A pesar de utilizar el versátil y sobresaliente RE Engine, Exoprimal está lejos de ser un juego que luzca increíble; sin embargo, su rendimiento es impecable, al menos en PlayStation 5. Nos sorprendió de manera grata que, a pesar de que hay instancias donde aparecen cientos de dinosaurios y un montón de efectos en pantalla, el desempeño permanece estable y nunca experimenté caídas de frames. El netcode también es de muy buena calidad, pues las desconexiones y el lag brillan por su ausencia. Capcom la sacó del estadio en estos apartados.

Una estructura prehistórica y anticuada

Por desgracia, Exoprimal muestra todas sus cartas en sus primeras horas y tiene muy pocas sorpresas bajo la manga. En consecuencia, poco a poco el factor diversión desaparece y la experiencia se torna aburrida y repetitiva de forma progresiva. Disfruté mis primeras partidas, pero al cabo de unas horas sólo quería ver los créditos finales. Esa es una muy mala señal.

Las partidas de Marea Jurásica se dividen en 2 secciones. La primera está enfocada en su totalidad en los elementos PvE y debemos cooperar para completar misiones como defender un VTOL o asegurar una zona. En la segunda, tenemos que superar otros desafíos mientras luchamos directamente contra el equipo rival.

Aunque las partidas presentan objetivos diferentes en cada sección, la fórmula general se repite una y otra vez con pocas excepciones. Mientras progresamos en la historia, aparecerán nuevos retos y tipos de dinosaurios que mantienen las cosas interesantes por más tiempo. Estas variaciones son bienvenidas, pero hacen poco para mitigar el sentimiento de monotonía a largo plazo.

Tampoco ayuda el hecho de que el contenido de lanzamiento se antoja escaso y desangelado. Aunque 10 exotrajes es una cifra generosa, sólo hay 4 mapas principales donde se desarrollan casi todas las partidas. Sin desearlo, memoricé los escenarios porque los visité un montón de veces. El verdadero problema es la falta de modos de juego. En este momento sólo está disponible Marea Jurásica, aunque una modalidad conocida como Guantelete Salvaje llegará el 28 de julio.

También es cierto que los combates, a pesar de ser muy vistosos y divertidos, llegan a ser demasiado caóticos y agotadores. En la mayoría de las ocasiones, disparar y golpear en todas las direcciones es la opción correcta. Esto provoca que juguemos en modo automático y que la carnicería de dinosaurios se convierta en ruido blanco.

Por otra parte, creo que las partes PvE son las más divertidas y las secciones donde ambos equipos cooperan para vencer a un jefe o superar un nivel especial son el punto alto de la aventura. Sí, los enfrentamientos contra otros jugadores son emocionantes, pero también frustrantes si carecemos de un grupo coordinado.

Durante las escaramuzas, podemos convertirnos en un dinosaurio para molestar al equipo rival. Es muy gratificante arremeter contra los jugadores contrarios, pero es una herramienta que rompe el equilibrio. Usar la transformación en el momento justo puede sentenciar una partida y las posibilidades de remontar son pocas.

Una historia interesante que nunca alcanza su potencial

La historia de Exoprimal tiene lugar 3 años después de que una serie de vórtices provocaran que dinosaurios invadieran al mundo. Encarnamos a Ace, un miembro del escuadrón Hammerheads que combate a la amenaza prehistórica con exotrajes para proteger a la humanidad.

Hay muchos conceptos interesantes que, desgraciadamente, se exploran poco debido a la estructura multijugador. Cuando terminamos un número determinado de partidas, desbloqueamos una cinemática y la trama avanza. El problema es que, durante los matches, hay nulo desarrollo narrativo en la inmensa mayoría de las ocasiones. Esto provoca que los acontecimientos importantes se sientan inconexos y pierdan impacto.

Aprendemos más sobre el lore general del mundo, la historia de los personajes y el misterio que esconde la IA conocida como Leviathan con los datos perdidos que obtenemos al jugar y que podemos revisar en cualquier momento en el Mapa de Análisis. Es una pena que la presentación de este apartado sea anticuada, pues nos limitamos a leer textos y escuchar conversaciones con pocas referencias visuales.

Los miembros de la tripulación Hammerheads demuestran tener carisma y la trama presenta ideas alocadas como mundos paralelos y viajes en el tiempo. Por desgracia, tienen poco margen para brillar y desarrollarse. Nos quedó la sensación de que el arco narrativo pudo beneficiarse de una campaña single-player más tradicional.

Exoprimal es un tropiezo para Capcom, pero está lejos de la catástrofe

Exoprimal es un juego como servicio basado en temporadas, por lo que debemos esperar que lleguen exotrajes, misiones, eventos y más en los meses venideros. La promesa de recibir nuevo contenido es atractiva, pero habrá que esperar para descubrir si las novedades son suficientemente llamativas como para que los jugadores regresen.

Y sí, hay un pase de batalla conocido como Survivor Pass que ofrece recompensas gratuitas y premium como skins, gestos, etcétera. Es un sistema ambivalente que es fácil de ignorar, pero estoy seguro de que su mera presencia enfadará a muchos jugadores. Eso sí, los aspectos para los exotrajes que están en el nivel de paga son muy atractivos.

Exoprimal es una experiencia mixta. Su concepto simple y adictivo ofrece diversión inmediata, pues destazar a decenas de dinosaurios con los exotrajes es muy, muy satisfactorio durante las horas iniciales; sin embargo, el sistema de combate es incapaz de sostener toda la experiencia y mitigar el sentimiento de monotonía.

Este título está lejos de ser un desastre total; incluso es difícil catalogarlo como un juego malo ya que hay destellos de grandeza. El problema es que hay mucho potencial desperdiciado, lo que es frustrante.

Exoprimal es como una montaña rusa vertiginosa, pero incluso la mejor atracción del mundo se torna aburrida si la repetimos una y otra vez con pocas variaciones. Dicho esto, creo que puede convertirse en un gran juego si los desarrolladores mantienen el dedo en el renglón y se comprometen con el proyecto. La pregunta es, ¿podrá retener el interés de la comunidad y evitar la extinción?

Exoprimal está disponible para PC, Xbox One, Xbox Series X|S, PlayStation 4 y PlayStation 5. Da clic en este enlace para obtener más información sobre él.

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