Cualquiera esperaría que un juego de Harry Potter para Kinect fuera la mejor manera de adentrarse verdaderamente en la magia de esta serie haciendo movimientos con tu varita mágica recién adquirida en Ollivander’s, jugando como buscador en un partido de Quidditch, participando en el Torneo de los Tres Magos e incluso derrotando a Aquel que no debe ser nombrado. Desafortunadamente, Harry Potter Kinect no hace justicia a la posibilidad.

Tomarás el papel de los estudiantes más populares de la saga para revivir los momentos que, según la descripción del juego, son los más significativos de todas las películas. Pero si tomamos en cuenta que el contenido de las cintas es cuantioso, seguramente después de jugar los 27 minijuegos de la campaña pensarás que faltaron escenas épicas que bien pudieron haber reemplazado a otras como la clase en la que Gilderoy Lockhart libera una jaula llena de traviesas hadas y deja a los estudiantes encerrados con las criaturas. Y esto no es únicamente por la relevancia del suceso, sino por la implementación de las mecánicas de juego.

Al principio te emocionará blandir una varita y hacer hechizos, no te importará que los movimientos sean los menos sofisticados y tal vez puedas pasar por alto que el juego no incluye una pequeña varita de juguete para sumergirte un poco más en la experiencia –aunque sí puedes improvisar con cualquier cosa que se le asemeje–, pero después de un par de minijuegos te aburrirás, pues los movimientos son repetitivos sin importar la actividad en la que estés.

Después de aprender unos cuantos hechizos en Hogwarts como Wingardium Leviosa –y darte cuenta de que los comandos de voz rara vez son detectados–, podrás participar en duelos contra otros magos que en realidad son poco divertidos y menos emocionantes de lo que parecen, pues sólo tienes que blandir tu varita sin temor a que se agote tu magia y esquivar o bloquear los hechizos de tu enemigo. Esto último es un poco engañoso, pues tienes que poner ambas manos al frente pero hay ocasiones en las que Kinect detecta el gesto muy tarde, y tu personaje termina recibiendo daño. También podrás retar a un amigo bajo esta misma mecánica, pero tendrás que asegurarte de tener un espacio muy amplio para jugar cómodamente y evitar percances.

Probablemente las partidas de Quidditch sean la actividad que más variedad ofrece, pues tienes que inclinar tu cuerpo para darle dirección a tu escoba y tratar de seguir un camino dorado para tomar más velocidad, tirar golpes y patadas para derribar a tus rivales, y por último, estirar la mano para atrapar a la Snitch dorada, lo cual a veces llega a ser un tanto impreciso.

Como mencionamos, la campaña consta de 27 minijuegos que te llevarán a través de algunos de los momentos más significativos de las películas. Al principio de cada uno te mostrarán una pequeña descripción de lo que sucede en esa escena mediante tomas de la cinta, y al final tu desempeño será calificado desde 0 hasta 5 estrellas. Para avanzar al siguiente minijuego, sólo es necesario alcanzar la calificación mínima de 1 estrella, pero hay actividades en las que esto representa un reto absurdamente complejo para chicos y grandes, no sólo porque la precisión con Kinect suele ser un problema, también porque en ocasiones la mecánica de la actividad no es clara por la falta de indicaciones en pantalla –y las pocas que hay no ayudan mucho–.

Para compensar esa complejidad, la campaña tiene 2 dificultades que varían únicamente en el puntaje que debes alcanzar para obtener cierta cantidad de estrellas, pero aún así, hay ocasiones en las que la discrepancia de complejidad entre cada actividad es muy notoria sin importar la dificultad en la que juegues, lo que significa que la curva de aprendizaje está mal definida.

Si quieres inmiscuirte más en la historia, también podrás crear a tu personaje dejando que Kinect fotografíe tu rostro y lo coloque en el cuerpo de un mago o bruja, pero te aseguramos que el resultado no te va a gustar.

No hay mucho que decir del aspecto gráfico de Harry Potter Kinect más allá de que los modelos de los personajes son fieles a los actores, pero el uso y calidad de texturas no les hacen mucha justicia. La música es la misma que la de las películas, así que al menos en ese aspecto tendrás una experiencia sumamente fiel. El doblaje de los personajes no está hecho por los actores originales, pero es un buen trabajo porque encontraron voces similares.

En general, si eres un verdadero fanático de la franquicia, Harry Potter Kinect podría llamar mucho tu atención, pero a final de cuentas no hay algo que te haga volver a jugar después de haber terminado la campaña. Para los más pequeños esta experiencia posiblemente sea más entretenida, pero los picos de dificultad en ciertos momentos seguramente causarán frustración.